Todavía en la plaza se escucha el eco de tu voz
y el chillar de tu columpio
los árboles melancólicos extrañan que tires de sus verdes cabellos
la tierra se mantiene llana, porque no hay quien excave
pájaros, perros y gatos todos fauna vagabunda
observan como diciendo ¿Dónde esta tú compañero?
Donde estas que no te escucho pedir un cuento para dormir…
En la cancha aún se ve tu flaca y pequeña silueta….
Además del torpe correr….
culpable de tantas heridas
El eco sigue llevando tu nombre en los sonidos que arrastra
y en el segundo piso las miradas de otros niños….buscan al de los cabellos revueltos y pestañas como de trampolín...
Mi suerte cambio. Ya estas aquí compañero mió…
Conversemos entonces de robots, bichos y dinosaurios…
Y cuanta musaraña se mueve por cielo y tierra
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